En una acalorada columna de opinión que publicó el diario Página/12, el máximo representante de Carta Abierta -la usina de filósofos e intelectuales que defienden al Gobierno- dedicó su tinta a explicar los resultados de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO).
Titulada "Frente a la dificultad", Horacio González se refirió a las causas que provocaron la dura derrota oficialista en los grandes centros urbanos y que representó la peor performance electoral en los diez años que llevan en el poder.
Entre los motivos, González cree que la función que cumplieron los medios de comunicación durante la campaña -e incluso antes-, fue vital y manejada desde las "sombras" por intereses del "conservadurismo" más rancio.
"El verdadero capitalismo globalizado no desea que prosiga (el Gobierno)", ensaya el intelectual k. "No obstante, los impulsos reformistas (del oficialismo) son pretextos variados para la crítica de un neorrepublicanismo que a veces siente estar frente a una dictadura", agregó.
El Director de la Biblioteca Nacional y mayor exponente de "Carta Abierta", también se refirió a los candidatos opositores: "Es necesario decir que hubo varias campañas. La de los partidos, coaliciones, ligámenes personales. Y la 'otra campaña', hecha por los karatekas en las sombras, alegres comediantes de individualismo posesivo, que sin duda tuvo grandes efectos".
Pero también tuvo tiempo de dedicar unas líneas hacia el elector que en el cuarto oscuro no optó por el Frente para la Victoria: "Se basaron y crearon un tipo de elector desideologizado, que convive con la inmediatez de tiempos quebradizos y en donde la mundialización de los gustos y formas de vida ejerce un mandato de condena sobre millones de personas en todo el mundo".
"Mantener las institucionales democráticas es vital", imprime González y añade que la "seguridad, inflación y corrupción" son "temas que cuando las izquierdas populares no toman adecuadamente están más fácilmente disponibles para que los nuevos conservadores se apropien de ellos".
Por último, el pensador también señala que ese "liberalismo" ahora "puede no aludir a invasiones, bombardeos, confiscación de embarcaciones, administraciones de la usura mundial que tiene a su servicio cortes supremas, aviones militares no tripulados, pero aparece como su complemento".
"Ese neoliberalismo se apresta a volver, alimentado por afluentes sombríos, que algunos conocen bien, otros no aciertan a detectar", dijo y concluyó: "Es tiempo de auscultar lo que somos y rehacernos en el acoso".
Entre los motivos, González cree que la función que cumplieron los medios de comunicación durante la campaña -e incluso antes-, fue vital y manejada desde las "sombras" por intereses del "conservadurismo" más rancio.
"El verdadero capitalismo globalizado no desea que prosiga (el Gobierno)", ensaya el intelectual k. "No obstante, los impulsos reformistas (del oficialismo) son pretextos variados para la crítica de un neorrepublicanismo que a veces siente estar frente a una dictadura", agregó.
El Director de la Biblioteca Nacional y mayor exponente de "Carta Abierta", también se refirió a los candidatos opositores: "Es necesario decir que hubo varias campañas. La de los partidos, coaliciones, ligámenes personales. Y la 'otra campaña', hecha por los karatekas en las sombras, alegres comediantes de individualismo posesivo, que sin duda tuvo grandes efectos".
Pero también tuvo tiempo de dedicar unas líneas hacia el elector que en el cuarto oscuro no optó por el Frente para la Victoria: "Se basaron y crearon un tipo de elector desideologizado, que convive con la inmediatez de tiempos quebradizos y en donde la mundialización de los gustos y formas de vida ejerce un mandato de condena sobre millones de personas en todo el mundo".
"Mantener las institucionales democráticas es vital", imprime González y añade que la "seguridad, inflación y corrupción" son "temas que cuando las izquierdas populares no toman adecuadamente están más fácilmente disponibles para que los nuevos conservadores se apropien de ellos".
Por último, el pensador también señala que ese "liberalismo" ahora "puede no aludir a invasiones, bombardeos, confiscación de embarcaciones, administraciones de la usura mundial que tiene a su servicio cortes supremas, aviones militares no tripulados, pero aparece como su complemento".
"Ese neoliberalismo se apresta a volver, alimentado por afluentes sombríos, que algunos conocen bien, otros no aciertan a detectar", dijo y concluyó: "Es tiempo de auscultar lo que somos y rehacernos en el acoso".
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