domingo, 21 de julio de 2013

"En Rosario los narcos le ganaron el territorio al estado provincial".


Es extraño ver a un secretario de Seguridad caminando en medias por el piso alfombrado de su despacho de Paseo Colón al 500, en el centro de Buenos Aires, a metros de la Casa Rosada. Berni tiene el escritorio repleto de mapas, estadísticas y planillas con informes de los distintos delitos que se producen cada 24 horas en Capital Federal y el interior del país. 


Parece que está relajado. Pero no. Cada 15 minutos recibe varios llamados que caen como rayos a los dos teléfonos que lleva en el cinturón. Dos colombianos que intentaron robar a un hombre en Tribunales, el avance de una investigación en la que participan fuerzas federales, el seguimiento de casos complejos con policías que son cuestionados a pesar de estos años de conquistas democráticas.

–¿Las fuerzas de seguridad son parte del problema? 

–Las fuerzas de seguridad a veces son parte del problema, es ahí cuando el control político es clave. Por eso que la policía tenga una connivencia con el narcotráfico no es para asombrarse, el problema es por qué la política. como en Rosario, no tomó el control de la policía. 

–¿Allí los narcos le han ganado el territorio al estado provincial?

–Absolutamemte. En política no se puede dejar de ocupar los lugares y los territorios. Y en Rosario los distintos grupos narcos le han ganado el territorio al estado provincial. Lo que pasa allí es que se están disputando el mercado local de cocaína. El problema del narcotráfico en Santa Fe es un problema global. El narcotráfico ha avanzado en todas partes del mundo. En Santa Fe se agrava porque los vacíos no existen en la política, espacio cedido, es espacio ocupado. Por un lado, hay un alto nivel de sectores vulnerables, una geografía apropiada para que los narcos pasen desapercibidos como son las villas de la zona. Y por el otro, una sociedad de consumo que confronta con el cordón de pobreza que tiene el Gran Rosario. Un estado provincial que se retiró de los barrios y esto lo puedo confirmar porque todas las veces que he ido a trabajar a Rosario ha habido una gran ausencia del estado. Por otro lado, como cóctel explosivo, una policía que está altamente sospechada, no por mí, sino por la justicia, de estar en connivencia con el narcotráfico. 

–Sin embargo, el gobernador Antonio Bonfatti denuncia que el gobierno federal lo dejó solo. 

–Es parte de la estrategia de no admitir lo que está sucediendo en Rosario. Las fuerzas federales siguen trabajando como en todas las provincias. Pero el problema no es la policía y la corrupción policial, porque eso sucede en todo el mundo. Es la forma que tienen los narcos para dominar los territorios. Es el secreto de la propagación del narcotráfico: la corrupción. El poder económico del narcotráfico es tan grande que corrompe a la justicia, al aparato político, la policía; todo lo que rodea. El problema es que cuando comenzaron las primeras investigaciones y la justicia procesó a los policías que custodiaban los bunkers de los narcos, el gobierno provincial se hizo el distraído y apañó a estos jefes policiales. El gobierno provincial no quiso avanzar en la misma línea que está avanzando el gobierno nacional. La lucha contra el narcotráfico no sólo se da contra las bandas organizadas, sino también hacia dentro de las fuerzas de seguridad. 

–¿Por qué sucede esto en Rosario?

–Porque para que haya un aumento en el consumo de drogas tiene que haber quien la compre. No hay primero un aumento de la oferta, lo que hay primero es un aumento de la demanda. Y el Gran Rosario, con el importante aumento económico que hubo en las clases populares, dio el sustento para la comercialización de drogas. La droga crece en los sectores donde creció la actividad económica. Es una zona donde ha crecido el consumo y tráfico de cocaína. Si bien Santa Fe tiene salida a Europa o hacia otros países, la criminalidad que vemos en Rosario no está ligada a la comercialización de drogas en el exterior sino a la disputa de la comercialización en el territorio. Es hacia dentro no hacia afuera el problema.

–¿La Argentina es un país de tránsito de drogas?

–Obviamente, porque somos un país que tiene una frontera directa con países productores de drogas. Según la OEA, nuestro país no figura en la lista de los 22 países donde mayor tránsito y tráfico de drogas existe como Colombia, algunos países de Centroamérica e incluso Brasil. 

La doble vara del macrismo

Según el secretario Berni, desde el Gobierno de la Ciudad no hay una idea clara sobre cómo dirigir a la Policía Metropolitana: "Desde que reprimieron la protesta de trabajadores del Hospital Borda, se nota que no saben qué hacer con esa fuerza. Ven una vaca y lloran. En una protesta de trabajadores arrojan gases y producen 40 heridos y 50 detenidos. Pero cuando se produce una contravención, como la de la semana pasada en el microcentro porteño, no actúan y dejan a la sociedad como rehén. Me gustaría que alguien me explique por qué razón la Metropolitana, que es cara e ineficiente, está a merced de los caprichos del jefe de Gobierno de la Ciudad."

No hay comentarios:

Publicar un comentario