martes, 24 de septiembre de 2013

Cristina y Dilma acordaron condenar ante la ONU el espionaje en la región.

La presidenta también coordinó con su par de Brasil una postura común para una salida no militar en Siria. Además, recibió al titular del BID. El repudio a los fondos buitre será otro tema clave en su discurso de hoy en la Asamblea General.



Esta tarde, aproximadamente a las 18:30 hora argentina, la presidenta Cristina Fernández dará su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas. Pero anoche, en la puerta del Hotel Saint Regis, sobre la calle 54 de Manhattan, la jefa de Estado argentina adelantó varios aspectos sustanciales de su alocución: denunciar a los fondos buitre que pretenden impedir que el país pueda cumplir con sus acreedores, protestar junto a Brasil por el espionaje cibernético norteamericano, reclamar cambios en el funcionamiento del Consejo de Seguridad de la ONU y apoyar una salida negociada y pacífica del conflicto por la utilización de armas químicas en Siria.

Todos estos puntos clave fueron anticipados ayer por la presidenta argentina luego de mantener un encuentro de casi una hora de duración con su par de Brasil, Dilma Rousseff.
El diálogo en el hotel donde se aloja la mandataria brasileña se produjo en momentos en que el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, brindaba en el Waldorf Astoria una cena de recepción a los mandatarios que llegaron a Nueva York para participar de la Asamblea General.

Obviamente, ni Cristina ni Dilma participaron de ese encuentro. La mandataria brasileña está muy disgustada con Washington por el espionaje que practica sobre su gobierno y empresas centrales como Petrobras. Y este enojo –que llevó a que suspendiera un viaje oficial a Estados Unidos previsto para fines de octubre–, Rousseff lo hará notar cuando abra hoy los discursos en la sede de la ONU.

"Vamos a ver qué dice Dilma. Nosotros también tenemos cosas importantes que decir sobre el tema, me parece que su actitud (por la de Rousseff) es de dignidad y de respeto por la soberanía del país. Episodios como ese, y los sufridos por Evo Morales y Nicolás Maduro, atentan contra la dignidad de toda la región. Hay cosas que merecen discutirse y ser debatidas", puntualizó Cristina tras un ecuentro bilateral al que calificó como muy positivo. "Excelente, como siempre cuando nos encontramos con Dilma", resumió.

También habrá una postura común sobre Siria, apoyando la salida negociada que propuso Rusia. Este tema, en el que "todo el mundo estuvo en vilo por lo que podían resolver dos países", dijo Cristina, servirá también para insistir con el reclamo de reformar el funcionamiento del Consejo de Seguridad de la ONU. "Necesitamos un mundo más democrático en serio", porque "no se puede vivir en un mundo donde todo dependa de lo que resuelvan una o dos personas", agregó la mandataria.

Y así se llegó, en la charla con los periodistas argentinos que llegaron para cubrir la Asamblea General, al punto de los fondos buitre y la decisión que la semana próxima podría tomar la Corte Suprema norteamericana sobre la causa que se lleva adelante en los tribunales de Nueva York.

"La resolución (del caso) no es importante sólo para la Argentina, es importante para el mundo. Creo que hay muchos países, muchos mandatarios que visualizan que el tema es así. Hoy Argentina es una pagadora serial y no la quieran dejar pagar, esto lo vamos a plantear mañana (por hoy). La del canje es una salida para muchos paises que estan en una posición similar", aseguró Cristina. "Argentina pasó de ser un deudor serial a ser un pagador serial y no nos quieren dejar pagar", insistió la presidenta, aunque garantizó que el país "va a pagar como sea", porque "lo único que Argentina no se puede permitir es no pagar".

Junto a los temas de Siria, espionaje y la "irracionalidad" de los fondos buitre, la presidenta argentina volverá a reiterar hoy el permanente reclamo para que Gran Bretaña se siente en una mesa de negociación por la soberanía de las Islas Malvinas, tal como lo pidió la propia ONU.

Otro punto importante que puede aparecer en su mensaje es el de la situación con Irán y la posibilidad de que funcionarios de ese país acusados de haber participado del sangriento atentado terrorista de 1994 contra la sede de la AMIA declaren ante un juez argentino.
En este punto, el cambio de actitud ante Occidente que parece llevar adelante el gobierno del presidente Hassan Rohani –muy distinto al de Mahmud Ahmadineyad–, abriría una puerta para que Irán termine por aceptar el memorandum de entendimiento que aprobó el Congreso argentino. Por eso será importante escuchar el discurso de Rohani –habla hoy antes que Cristina– y ver si sus palabras se pueden traducir en un encuentro aquí en Nueva York entre funcionarios argentinos e iraníes.

Ayer, antes del encuentro que mantuvo con Rousseff, la mandataria argentina recibió en el piso 54 del Hotel Mandarín Oriental al titular del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el colombiano Luis Alberto Moreno.

Al salir de ese encuentro, Moreno destacó que el BID "tiene una actividad regular con la Argentina que obviamente esperamos seguir manteniendo". En la reunión también repasaron la línea de crédito de 1200 millones de dólares y el préstamo de 300 millones de dólares que el BID aprobó días atrás para mejorar el ferrocarril General Roca. Además, hablaron del proyecto de la presidenta para mejorar la competitividad del llamado "Noreste Grande", en referencia a la región conformada por las provincias de Catamarca, Corrientes, Chaco, Formosa, Jujuy, Misiones, Tucumán, Salta y Santiago del Estero.

Como cierre de las actividades oficiales de ayer, la jefa de Estado mantuvo un encuentro en el hotel donde se aloja con el empresario argentino Eduardo Eurnekian.

Hoy, a las 18:30 hora argentina –una menos que en Nueva York–, Cristina hará oir su voz ante una Asamblea General que despertó muchas expectativas y que tiene en el tema sirio el eje que atravesará las distintas posiciones de los mandatarios. Tras su discurso, por la noche, la presidenta retornará a la Argentina.

No hay comentarios:

Publicar un comentario