La NASA informó sobre la fuga la noche del jueves y comentó que ese problema ya había surgido con anterioridad.
La fuga fue detectada en un radiador de la ISS y su reparación estará a cargo de los astronautas estadounidenses Tom Mashburn y Chris Cassidy, que serían controlados desde la nave por su colega canadiense Chris Hadfield.
El jefe de programas tripulados de la agencia espacial rusa Roscosmos, Alexéi Krasnov, comentó a RIA Novosti que el segmento ruso de la ISS sigue funcionando en régimen normal.
"La fuga ocurrió en el segmento estadounidense, pero no es crítico, ya había sucedido", indicó.
El amoníaco se utiliza para enfriar los canales generadores de electricidad en la estación. Según la NASA, el sistema de enfriamiento en el que se detectó la fuga puede desconectarse dentro de 48 horas.
En noviembre de 2012 ya se había producido una fuga de amoníaco en la ISS. En aquel entonces, los astronautas japonés y estadounidense aislaron el tramo averiado y conectaron uno de reserva.
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