Después de la apertura la víspera de la campana electoral, el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) emitió un comunicado en el cual pide al Tribunal Supremo Electoral (TSE) establecer las garantías para asegurar el proceso.
Reclama que los aspirantes deben comprometerse a aceptar los resultados de los comicios y divulgar sus programas para impulsar el desarrollo económico y social, y la seguridad, e insiste en que sus mensajes deben promover la unidad y la paz.
Al TSE los empresarios le exigen transparencia en los procesos y resultados electorales y que actúe de manera neutral y despolitizada y con la exactitud del Censo Nacional Electoral.
Asimismo insisten en que el gobierno realice los desembolsos correspondientes al TSE para que no existan retrasos en el programa electoral y piden a las Fuerzas Armadas que garanticen transparencia y cumplan el mandato constitucional.
En tanto la Iglesia católica propuso al pleno de magistrados del TSE crear un observatorio electoral ante las constantes denuncias que se dan en el proceso.
El sacerdote Germán Cálix, representante de Caritas en Honduras, dijo que de esa forma se garantizaría que las elecciones transcurran de una manera limpia y transparente para que logren la estabilidad que el país necesita.
Entre las población hay mucha incredulidad sobre el papel de los políticos y con la instalación de un observatorio que analice el contexto vamos a descubrir problemas antes de las elecciones para que el tribunal pueda actuar a tiempo, dijo.
También los pastores Alberto Solórzano y Pedro Reyes, en representación del liderazgo evangélico, pidieron a los candidatos presidenciales cumplir con el pacto ético de no agresión ni odio durante la campaña y los comicios. Insistieron en la utilidad de cumplir el Compromiso de Garantías Mínimas para la Ética y la Transparencia Electoral suscrito hace unos días por los aspirantes presidenciales.
Reyes insistió en que ningún político ofenda a otro y que permitan al pueblo valorar sus programas y decidir quién debe gobernar en los próximos cuatro años.
Cumplir ese compromiso sería vital para darle tranquilidad a la gente, dijo Solórzano y recordó que confrontar y dividir al país no es nada saludable.
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